Todo pasó muy deprisa. Como suele suceder en los perros con hernias discales recibimos una llamada de teléfono indicando que el paciente no podía caminar de forma súbita.
Nuestros compañeros del Hospital Veterinario Estoril, no lo dudaron y actuaron rápidamente y con total coordinación. Nos facilitaron todos los datos para que estuviéramos preparados.
Cuando Cata, una guapísima bulldog francés, llegó al Hospital Veterinario Puchol ese lunes de julio, todo estaba preparado.
¿Qué le pasaba a Cata?
El Servicio de Neurología, exploraron rápidamente a Cata. El animal arrastraba sus extremidades posteriores y no se sostenían pie.
Estos signos clínicos son típicos de procesos agudos que suceden a nivel de médula espinal, como pueden ser, traumatismo vertebrales, hernias discales, trombos, etc. Cata mantenía una buen sensibilidad y dolor profundo de en sus patitas…parecía que «habíamos llegado a tiempo».
Rápidamente se optó por realizar una Resonancia Magnética de Urgencia, donde la radióloga confirmó lo que nos temíamos, un daño medular severo en las vértebras lumbares L4, L5 y L6, producido por la extrusión de material discal de forma aguda.
¡Cata tenía una discal que había que atender sin perder tiempo!
Cata necesitaba una cirugía urgente
Con estos datos, sabíamos que el paciente requería de cirugía, y cuanto antes mejor.
En este tipo de hernias, se necesita abordar la zona de la médula donde está el material discal roto y comprimiendo y retirarlo de manera cuidadosa, permitiendo así que la inflamación y el daño medular empiece a reducirse poco a poco.
Esta cirugía recibe el nombre de Hemilaminectomia, y en el caso de Cata, necesitó, abordar los espaciaos que existen entre la vértebra Lumbar L4 y L5 y L5 y L6.
¡La cirugía había sido un éxito! Ahora tocaba hospitalización para valorar el progreso y reducir el dolor.
La recuperación: Cata empieza a caminar
Fueron 48 horas muy intensas, controlando el dolor y haciendo rehabilitación intensiva en el hospital, pero al tercer día, Cata se mantenía en pie, y podía dar sus primeros pasos.
La coordinación de los Servicios de Neurología, Imagen, Anestesia, Cirugía, Hospitalización y Rehabilitación había dados sus frutos. Es increíble ver recuperarse a estos pacientes que acuden paralíticos al hospital y que caminan unos días después gracias nuestros cuidados y a la confianza de sus propietarios.
Ahora a Rehabilitación
Quedan varias sesiones de Rehabilitación. Lo normal para un paciente que ha sufrido un cuadro clínico tan severo.
Sesiones de TENS, Cinesiterapia activa y cinta subacuática, LASER en la zona quirúrugica.
Cata es muy participativa y constante, sin duda eso ha favorecido su buena recuperación.
Historias como la de Cata suceden cada día en nuestro Hospital y en muchas clínicas y hospitales de nuestro país.
La predisposición de algunas razas a sufrir hernias discales debe ser conocido por sus propietarios, ya que deben reconocer rápidamente los signos clínicos que producen y acudir de forma urgente a un veterinario.
Nuestro sincero agradecimiento a los propietarios de Cata y a nuestros compañeros del Hospital Veterinario Estoril por su confianza y amabilidad.
Hospital Veterinario Puchol