A medida que avanzan los conocimientos médicos y aumenta la concienciación de la población acerca del bienestar de los animales de compañía, surgen nuevas especialidades como la rehabilitación veterinaria, que pretende optimizar la recuperación tras diversas intervenciones médico-quirúrgicas. ¿Sabes cómo se realiza?
En primer lugar, estos pacientes deben someterse a una valoración funcional, que servirá para determinar las limitaciones que presentan y establecer una lista de objetivos en base a los cuales estableceremos las terapias a administrar. La valoración funcional realizada en el Hospital Veterinario Puchol consta de varios aspectos, entre los que se incluyen:
- Estudio objetivo de marcha en plataforma de presiones, mediante el cual obtenemos numerosos datos relacionados con la marcha del paciente como el porcentaje de peso que el animal carga sobre cada extremidad. Además de informarnos acerca del grado de disfunción del paciente en el momento de su realización, este tipo de estudios nos permiten evaluar la eficacia del tratamiento con el paso de las sesiones.
- Exploración ortopédica y palpación muscular específica, mediante la cual pretendemos detectar puntos de dolor y/o disfunción.
- Exploración neurológica, de especial interés en pacientes con patologías afectando al sistema nervioso central o periférico. En ella, se evalúan aspectos como el grado de paresia (debilidad) o la presencia de ataxia (incoordinación), que requerirán de ejercicios y terapias específicas durante las sesiones de rehabilitación.
- Determinación de medidas morfométricas (contornos musculares y ángulos articulares). Entre los objetivos de nuestras sesiones de rehabilitación se encuentran los de mejorar la fuerza y masa muscular, y el rango de movilidad articular sin dolor. Al igual que ocurría con el estudio objetivo de marcha, estas determinaciones nos permitirán evaluar la progresión del paciente con el transcurso de las sesiones.
Una vez realizada la evaluación del paciente, debemos fijarnos los objetivos del programa de rehabilitación. Algunos de los objetivos que nos solemos marcar incluyen: disminuir el grado de dolor, mejorar el rango de movilidad articular, minimizar/prevenir la aparición de atrofia muscular, o prevenir/tratar sobrecargas musculares compensatorias derivadas de una marcha anormal.
En base a todo lo anterior, el veterinario rehabilitador elaborará un plan de rehabilitación adaptado a las necesidades individuales de cada paciente, establecerá una periodicidad de visitas para realizar las sesiones (normalmente, 1-2 veces semanales suele bastar) y elaborará una lista de ejercicios a realizar en casa con el paciente.
Nuestro servicio de Rehabilitación y Fisioterapia está a disposición de los veterinarios que lo deseen. Además, tiene una gran relación con los servicios de Traumatología y Neurología. Ya que muchos de los pacientes lo requieren para mejorar su recuperación. ¡Consúltanos!