La edad, la raza o la alimentación de nuestros animales son algunos de los factores de riesgo para la aparición de problemas durante la micción.
¿Conoces las consecuencias que puede tener la obstrucción urinaria en el perro y en el gato en su calidad de vida?
En este artículo, resolveremos todas tus dudas y te ayudaremos a identificar y a prevenir esta enfermedad
La obstrucción urinaria es una de las urgencias médicas más común en la clínica de pequeños animales, por lo que es importante que sepas identificarla y acudas al centro veterinario más cercano lo antes posible.
Anatomía y definición
El aparato urinario de nuestras mascotas está constituido por una serie de órganos que son responsables de regular la absorción y eliminación de líquidos así como de sustancias tóxicas y se divide en:
- Tracto urinario superior: riñones y uréteres.
- Tracto urinario inferior: vejiga urinaria y uretra.
La obstrucción urinaria se define como la dificultad para que la orina pase correctamente desde los riñones, donde se produce, hasta la uretra, por donde se excreta.
Esta dificultad en la eliminación de la orina se puede presentar a cualquier nivel del tracto urinario; sin embargo, la mayoría suelen localizarse en la uretra y la vejiga de la orina.
Principales síntomas de la obstrucción urinaria en el perro y en el gato
- Dificultad al miccionar (disuria).
- Presencia de sangre en la orina (hematuria).
- Dolor durante la micción (estranguria).
- Incremento en el número de micciones y en pequeñas cantidades (polaquiuria).
- Letargia, apatía, vómitos, normalmente asociados a un fallo renal y a un incremento en los valores de la creatinina y urea.
- Dolor y/o distensión abdominal.
La sintomatología que puede presentar el paciente depende de dos factores:
La gravedad de la obstrucción, siendo esta parcial o completa. Así como de la velocidad a la que se presenta: aguda o crónica.
Un paciente que de forma aguda y rápida, sufre una obstrucción urinaria completa, suele producir unos signos clínicos muy complicados que requieren una intervención urgente.
¿Por qué se produce la obstrucción urinaria?
Obstrucción urinaria en el perro
En la especie canina, la obstrucción se debe fundamentalmente a dos tipos de causas: anatómicas o funcionales. En la siguiente tabla se recogen algunas de las más comunes.
Los urolitos o cálculos urinarios son formaciones de tipo mineral que pueden localizarse en cualquier zona del tracto urinario provocando una obstrucción parcial o completa.
En general, su incidencia es baja y su localización más frecuente es el tracto urinario inferior. Entre las causas más comunes se encuentran: problemas hereditarios, congénitos, metabólicos y/o infecciones urinarias.
Los principales factores de riesgo son la edad, la raza y el sexo, entre otros.
El tratamiento médico y/o quirúrgico va a depender del tipo de urolito y de su localización.
Obstrucción urinaria en el gato
En la especie felina, las causas no son del todo conocidas y es importante diferenciar entre un episodio de:
- CIF (cistitis idiopática felina): Hablamos de CIF cuando no se encuentra el origen de los signos clínicos.
- FLUTD (enfermedad de vías urinarias bajas): Se trata de FLUTD cuando observamos signos clínicos compatibles y es posible determinar la causa que los está produciendo.
¿Y por qué resulta difícil diferenciar ambos procesos?
Aproximadamente, un 65-70% de los gatos con signos de FLUTD padecen CIF, y entre un 80-85% de los felinos con CIF los signos clínicos mejoran en 3-4 días sin necesidad de instaurar un tratamiento.
La cistitis idiopática representa el 50-70% de las patologías urinarias felinas y se caracteriza por episodios de dolor al miccionar con vocalizaciones o la presencia de sangre en la orina.
Los signos clínicos suelen resolverse en menos de 7 días sin necesidad de tratamiento. Sin embargo, hay un ligero porcentaje de gatos que sufren recaídas, por lo que es importante que, como propietarios, conozcamos los principales factores que predisponen a sufrir este tipo de afección.
El estrés es uno de los factores más importantes en la aparición de la cistitis idiopática felina por lo que es fundamental reducirlo mediante un buen manejo y enriquecimiento ambiental.
Cambios en la alimentación o la introducción de una nueva mascota en casa puede provocar que nuestro gato comience a presentar problemas durante la micción.
A continuación, os damos algunos consejos para minimizar situaciones de estrés:
- Cajas de arena amplias y limpias. Aumentar el número de bandejas, al menos una por animal. Es importante que el arenero se encuentre separado del comedero.
- Creación de zonas de juego en las que pueda rascar, trepar, esconderse y descansar. (Enriquecimiento ambiental)
- Puntos con agua fresca y limpia en varios lugares de la casa.
- Para aumentar la ingestión de agua se puede cambiar el pienso seco por una alimentación húmeda.
- Es muy recomendable recurrir a terapia con feromonas que tienen como objetivo reducir la ansiedad. Pueden ser una buena opción si se utilizan de forma complementaria al resto de opciones. Nosotros recomendamos Feliway®
¿Cómo se diagnostica la obstrucción urinaria en el perro y en el gato?
Para llegar a un diagnóstico, el veterinario/a realizará unas preguntas sobre el paciente para obtener una anamnesis detallada y llevará a cabo un examen físico completo que le permita decidir qué pruebas complementarias serán necesarias.
Historia clínica y examen físico: en cuanto a la exploración, se valoran si existen signos de hipoperfusión de los tejidos (deshidratación), la presencia de molestia o dolor abdominal, el tamaño y consistencia de la vejiga y/o los riñones y realizará palpación rectal.
Además, es importante incluir un examen neurológico, clave para evaluar si existe origen neurogénico y su localización.
Pruebas laboratoriales: siempre empezamos por una analítica sanguínea completa y un análisis de orina (urinanálisis)
Hemograma: aumento de leucocitos, normalmente los neutrófilos. Leucograma de estrés
Bioquímica: incremento de los valores renales (creatinina y urea), y en muchas ocasiones del potasio (Hiperpotasemia)
Urianálisis: en una muestra obtenido por punción estéril de la vejiga urinaria (cistopunción), que incluirá: análisis de la turbidez, pH, sedimento y/o cultivo de orina
Diagnóstico por imagen:
- Radiografía simple abdominal: permite evaluar la posición de la vejiga, detectar la presencia de cálculos radiodensos en riñón, uréter, uretra y/o vejiga y tumores. Sin embargo, una radiografía simple no descarta la presencia de anormalidades físicas, por lo que debe complementarse con una ecografía abdominal.
- Ecografía abdominal: permite una exploración muy completa del aparato urinario, principalmente a nivel renal, vesical y prostático (en machos).
- Radiografía de contraste: útil para la detección de cálculos, tumores o anormalidades en la uretra como estenosis.
Hay ocasiones en las que será necesario realizar pruebas de imagen avanzada (TAC o resonancia magnética) para poder avanzar en el diagnóstico.
Tratamiento de la obstrucción urinaria en perros y gatos
La elección del tratamiento dependerá del estado del paciente y de la causa más probable dentro de nuestros diagnósticos diferenciales.
Tratamiento médico de la obstrucción urinaria:
- Administración de fluidoterapia intravenosa ajustada al desequilibrio electrolítico y deshidratación del paciente.
- Sondaje uretral atraumático y estéril hasta que los valores renales se normalicen.
- Urohidropropulsión retrógada: esta técnica permite forzar a los urolitos a volver a la vejiga irrigando la uretra una vez hemos conseguido sondar al paciente.
- Analgesia, antiinflamatorios y/o antibioterapia (esta última sólo en el caso de que sea necesaria).
- Disolución médica: sólo en aquellos urolitos localizados en vejiga o pelvis renal. La disolución médica puede realizarse en cálculos de estruvita, uratos y cistina.
- Dietas específicas: los cálculos formados por estruvita pueden disolverse mediante dietas específicas que esttre otras muchas cosas tienen la capacidad de modificar el pH de la orina. Dietas Gato – Dietas Perro
Tratamiento quirúrgico de la obstrucción urinaria:
En aquellos casos que requieran cirugía, la técnica a elegir dependerá de la localización de la obstrucción.
- Cistotomía: se realiza para eliminar los cálculos alojados en la vejiga. Con un sondaje adecuado y una técnica quirúrgica correcta los cirujanos son capaces de retirar la totalidad de los cálculos.
- Uretrostomía: en algunas ocasiones es necesario emplear esta técnica que consiste en una apertura en la uretra de forma permanente que permita la salida de cálculos que puedan originarse en un futuro.
- Citoscopia/ureteroscopia: el objetivo de estas técnicas es reducir el traumatismo durante la cirugía así como el tiempo de hospitalización del paciente.
- Litotricia: consiste en la fragmentación de los cálculos mediante ondas de choque o láser.
- Stent ureteral o colocación de SUB Bypass ante la presencia de cálculos en el uréter o los uréteres en la especie felina.
Conclusiones
Recuerda que la dificultad de orinar parcial o totalmente de tu perro o tu gato , es una Urgencia Veterinaria. La realización de pruebas rápidas determinarán las opciones médicas o quirúrgicas a seguir.
La prevención también es importante, y debemos ofrecer y estimular a las mascotas a que beban agua, o que tomen comida húmeda. por otro lado la alimentación de alta gama, puede ayudar a prevenir estos problemas.
Queremos agradecer a nuestras veterinarias Cristina García y María Méndez la realización de este artículo, que esperamos haya sido de ayuda. No dudes en contactar con nosotros para cualquier duda.